27 de febrero de 2012

Los negocios de los colegas de Alí Babá

Las cifras son escandalosas. Estamos entregando dinero del contribuyente, dinero de los sufridos y esforzados españoles, a unos sindicatos que en el año 2010 obtuvieron de sus empresas, de sus negocios, beneficios por más de 10 millones de euros. ¡Subvencionamos a empresarios, los sindicatos, que cerraron el ejercicio del 2010 con más de 10 millones de euros de beneficio!

Lo que inicialmente es una práctica legítima en un entorno de libertad económica, contra lo que ellos curiosamente siempre protestan, en este caso se vuelve en algo ignominioso debido a que los subvencionamos y a que en sus declaraciones atacan precisamente sus propias prácticas empresariales.

De todos es sabido al haber sido noticia de los despidos aprovechando la legislación nueva, de las irregularidades en las situaciones laborales de los trabajadores de los sindicatos, de los EREs sindicales (el último el de CCOO en Cataluña que deja en el paro a 50 personas para según ellos equilibrar sus cuentas), de los escándalos relacionados con el ladrillo, y de la vida de lujo y de auténticos altos ejecutivos de los dirigentes sindicales. Pero lo que no había sido divulgado y se había tapado convenientemente junto con el número de votos, afiliados y liberados, son los múltiples negocios, activos y beneficios, de las dos centrales sindicales mayoritarias. Los negocios de UGT y CCOO. Su cifras.

El complejo entramado empresarial de los sindicatos, con sociedades anónimas y limitadas, incluye al BBVA, Telefónica, Grupo Atlantis, gestoras, empresas relacionadas con el ladrillo, consultorías y empresas de formación. En total estas empresas de los sindicatos, o participadas por ellos, suman unos activos de más de 240 millones de euros, y sólo en el ejercicio del 2010 obtuvieron un beneficio de 10.595.000 euros.Atacan a los bancos y participan en sus negocios, atacan el ladrillo y participan en sus negocios, atacan a las empresas y son grandes empresarios... obtienen beneficios millonarios y les damos dinero público.

Está claro que estos grandes asaltadores de marisquerías y bolsillos ajenos tienen motivos para reírse... de nosotros. La cuestión es, ¿Hasta cuándo se lo vamos a permitir?.

No hay comentarios:

Publicar un comentario