30 de agosto de 2013

Obamator.


Ya saben que una de las frases del genial Marx, Groucho por supuesto y no Karl, fue esa que decía "Nunca pertenecería a un club que admitiera como socio a alguien como yo". Y lo mismo casi cabría pensar del club al que pertenece Obama, ya saben, el del Nobel de la Paz. Mal nombre para una distinción entregada a tan belicoso presidente.


Y es que las guerras se van acumulando en una espiral violenta de la que no quiere apearse el presidente más intervencionista y guerrero que ha tenido EE.UU. en los últimos tiempos. Irak, Afganistán, Libia, Siria... ¿Irán? Como las hojas en un calendario las guerras, y los civiles, van cayendo una tras otra.

Sin embargo lo curioso en esta ocasión no es que Obama vuelva a demostrar su afición bélica ni que intente acaparar todavía más poder en su país, a este paso dentro de poco podremos hablar del régimen de Obama, sino que en Siria se da la paradoja de que va a combatir al lado de Al Qaeda ¡La misma a la que combate en Afganistán!. Y que, reduciéndolo al absurdo, va a bombardear Siria porque Siria bombardea Siria.

Como sheriff enloquecido Obama se mete en asuntos internos de terceros países, sacrificando vidas de propios y extraños, para su beneficio y de aquellas facciones que disputan el poder al dirigente que no es de su agrado o no le conviene. Nada importa el que dichas facciones sean integristas o que su concepto de la democracia y las libertades sea más oscuro que la piel del presidente de EE.UU. Obama sigue la senda de Roosevelt como sabueso el rastro de una presa para enmascarar su gestión desastrosa, y a falta de un Japón que lo meta en una gran guerra, él se la va buscando, como decía la canción, "de a poquitos".

Ni el derecho internacional, ni los diversos organismos políticos de control internacionales, ni las propias leyes estadounidenses avalan su belicismo y su actitud de matón fascista. Y citando al propio Barack Obama en 2007: “El presidente no tiene poder según nuestra Constitución para, unilateralmente, autorizar un ataque militar en una situación que no implique detener una amenaza actual o inminente a la nación” Así que volviendo a citar a nuestro siempre querido Groucho, aplicable también en este caso al PSOE y su apoyo a la guerra sin resolución de la ONU, "Por quién me ha tomado, yo tengo unos principios... y si no le gustan tengo otros".

La socialdemocracia tiene en él a un gran presidente, los ciudadanos de EE.UU. y los defensores de la Libertad a uno de los peores, y el mundo entero a un peligroso individuo armado hasta los dientes.

25 de agosto de 2013

Mamá, quiero ser político.

¿Se acuerdan de aquel famoso “Mamá, quiero ser artista”? En aquellos tiempos era el equivalente de la bomba atómica pero en lo familiar, algo así como que la niña o el nene se perdían en la más ignominiosa de las profesiones. Luego cambió poco a poco el concepto de ese “artista” que, si al principio se refería al arte escénico variado, al final traspasaría los escenarios de teatro y las pantallas de cine hasta los escenarios políticos y las pantallas de televisión. Y así hoy en día, cuando nos sueltan la frase de “quiero ser artista” ya sabemos que sus altas miras están puestas en Sálvame de Barrio, el Gran DeLuxe, y otras perlas contemporáneas como casas, campamentos y demás bodrios variados. En fin, para gustos los colores.

Pero la perla de todas, oigan, es esa que podemos llegar a escuchar de: “Mamá, quiero ser político”. ¡Político!. Imagínense, de pequeños dándoles la paga y de mayor pagándoles el puesto. El bolsillo llorando encogido, la abuela materna diciendo que es culpa del padre, mientras éste incrédulo menea la cabeza y musita frases del estilo de “No sé en qué hemos fallado” o “¿Qué hemos hecho mal?”. Un drama. El nene o la nena quieren ser políticos.

Y es normal. La política, en este sistema que padecemos con un terrorífico 26% de paro, se ha profesionalizado como un gremio más merced a los privilegios de los que goza. Se ha profesionalizado no como un servicio y honor hacia los ciudadanos, remunerado convenientemente, sino como una forma de medrar a costa de éstos. Se ha convertido en el clero del s. XXI, en la iglesia (el partido) de la nueva religión (la política), en uno de los estamentos privilegiados del Nuevo Régimen.

La existencia de las diferentes órdenes religiosas (partidos) con sus claustros y conventos (organizaciones juveniles y fundaciones) siempre sirvió en el pasado para colocar a los hijos sobrantes, a los tontos o a los que no se podía o no se sabía educar. Y las diferentes órdenes (partidos) acogían a todos aquellos que les eran ofrecidos para ser formados como fieles seguidores (afiliados y simpatizantes) sin que se tuvieran que preocupar más que por medrar dentro de la orden (partido) a costa de los siervos (ciudadanos) seglares, y sin tener que rendir cuentas a la justicia ordinaria como dichos siervos, sino que recibían un trato especial y estaban amparados por un fuero especial.

Así el ingresar en una orden religiosa en el pasado, como hacerlo en un partido político en el s. XXI, servía para “asegurar el futuro” a costa del prójimo y no para servirlo con ejemplaridad como una actividad honrosa. Era y es pura supervivencia en tiempos duros y canallas.

Claro que siempre encontraremos excepciones, políticos honrados y trabajadores, pero lo cierto es que al final no dejan de ser sino personas bien intencionadas que no hacen más que alimentar al mismo sistema perverso que les permite realizar su actividad y que impide al mismo tiempo que dicha actividad progrese más allá de la anécdota.


Así que al final cuando el nene o nena dicen esa frase de “Mamá, quiero ser político”, no piensan en sacrificio, servicio, honor y honradez, en realidad lo que dicen es “Mamá, quiero tener todo eso que ellos tienen”. Quieren poder, privilegios, y todo lo que ven que sus padres y el común de las personas no tienen pero que sí gozan los políticos. Quieren pertenecer, en definitiva, a un estamento privilegiado.

20 de agosto de 2013

Sobre el Peñón y el infierno fiscal.

Uno de los argumentos para defender la posición española frente al contencioso con Gran Bretaña sobre Gibraltar es que en la colonia británica se pagan menos impuestos que en España.

Pues oigan, es muy fácil solucionar ésto ¡Paguemos en España tan pocos impuestos como en Gibraltar!

Si España dejase de ser un infierno fiscal nos iría bastante mejor, aunque eso signifique que los políticos pierdan poder. Incluso si en el peor de los casos sólo una franja cercana a Gibraltar se declarara zona franca, ya supondría un  avance. Por no hablar del empleo que se generaría en la zona.

Así que la solución es sencilla ¡Que España deje de ser un infierno fiscal!

Conversación grabada con SITEL (o no):
- Quiero hablar con Mariano.
- Un momento. Hola, soy el secretario 1º de Alfredo que quiere hablar con Mariano.
- Un momento. Hola, soy la secretaria 2ª de Alfredo que quiere hablar con Mariano.
- Un momento. Hola, soy la secretaria 3º de Alfredo que quiere hablar con Mariano.
- Un momento. Hola, la secretaria 3ª de Alfredo dice que quiere hablar con Mariano. Te paso.
- Hola, soy la secretaria 2ª de Mariano ¿En que te puedo ayudar?
- Hola, soy la secretaria 3ª de Alfredo te paso con la secretaria 2ª.
- Hola, soy la secretaria 2ª de Alfredo que quiere hablar con Mariano.
- Hola, te paso con la secretaria 1ª de Mariano.
- Hola, que Alfredo quiere hablar con Mariano. Te paso con el secretario 1º de Alfredo.
- Hola, soy el secretario 1º de Alfredo que quiere hablar con Mariano.
- Hola Mariano, Alfredo quiere hablar contigo.
- Vale páshame.
Unos segundos más tarde...
- ¿Mariano?
- shí
- Agárramela con la mano. jajajaja
- Alfredo. Cómete un pedo jajajaja. Shigues tan agudo como siempre.
- Y tú y tú
- Bueno ¿Que quieresh?
- Oye esto de la economía se nos va de las manos. ¿No se te ocurre nada para arreglarlo?
- Puesh no. Pero... puedo llamar a un asheshor... venga ahora te llamo.
- Venga no tardes Mariano.... marrano jajaja
- Que no Alfredo... torpedo jajaja
- Oye soy Mariano pásame con algún asheshor de economía.
Después de 15 llamadas entre secretarios/as...
- Hola Mariano, soy el asesor de "como incrementar los impuestos".
- Hola hombre, ¿she te ocurre algo para solucionar la economía?
- Pues no. Puede que el asesor de "como justificar gastos inútiles y que se crean que es por su bien"
Después de otras quince llamadas entre secretarios/as...
- Hola Mariano, soy el asesor de "como justificar gastos inútiles y que se crean que es por su bien".
- Hola. ¿She te ocurre como solucionar el problema de la economía?
- Pues no.
Después de quince mil llamadas entre secretarios/secretarias y consultados mil asesores...
- Hola Mariano, soy el asesor de "un poco de sentido común"
- Oye, ¿she te ocurre algo para solucionar la economía?
- Pues no. Pero podría hablar con el portero de donde vivo, que es muy apañao. Lo mismo te arregla la caldera, que te cuelga un cuadro, que te barre la escalera.
- Puesh venga que tengo prisha.
Al día siguiente....
- Hola Mariano, he hablado con mi portero y dice que si se redujera la estructura del Estado, se redujera la burocracia, se bajasen los impuestos a las empresas, se abaratara el coste de la mano de obra reduciendo impuestos a los trabajadores, se bajase el IVA, no se castigara el ahorro y se crease un clima de confianza real, habría inversores y empresas extranjeras dispuestos a instalarse en España, habría demanda de trabajadores y se reduciría el paro y se pondrían cientos de miles de millones de euros en circulación lo que favorecería el consumo y el crecimiento.
- Ya, pero esho shon medidash liberalesh.
- Pero puede que funcione.
- No shé, she lo comentaré a Alfredo.
Después de quince llamadas entre secretarios/as...
- Alfredo... me lo quedo jajaja
- Mariano... tócame el piano jajaja.
- Esho, esho, que no she pierda la alegría.
Después de contar la idea del portero...
- A ver Mariano, claro que esas medidas podrían funcionar... pero son LIBERALES!!!
- Esho mishmo he penshado yo. ¿Y entonces que hacemos?
- Subir impuestos, como siempre.
- ¿Y no she cabreará la gente?
- No te preocupes Mariano. Verás yo saco un plan de subida de impuestos, digamos para recaudar 40.000 millones de euros. Así tu puedes sacar otro que sólo sea para recaudar 20.000 millones. Tu gente no protesta y la mía se queda contenta.
- Oye fenomenal. Ashi shi ganash lash próximash eleccionesh puedesh volver a shubir losh impueshtosh shin que proteshte la gente. Venga te dejo.
- Hola soy Mariano, páshame con el minishtro de economía.
- Hola soy la secretaria 1ª de Mariano que quiere hablar con el ministro de economía.
- Vale, hola, soy la secretaria 2º de Mariano que quiere hablar con el ministro de economía...
(Continuará... o no)